Las tapas, una vez más, son la versión "fina" de las típicas tapas españolas, esto es, siempre más reducidas, o menos bastas, pero de gran calidad. Vale la pena probar el bocadillo de jamón ibérico, muy típico quizá pero está hecho con un pan al aceite...buenísimo. También sin duda las bombas de carne y las berenjenas...Menos buena la tortilla, hay sitios en Madrid donde la famosa tortilla "deconstruida" la hacen mejor...Aunque no se puede probar todo, las bandejas que veíamos alrededor tenían todas buenísima pinta: las hamburguesitas, las croquetas, las bravas...
Recomiendo que vayáis a la parte de dentro, en primer lugar porque la terraza da a Neptuno y me parece un poco bulliciosa, y en segundo, porque los precios aumentan cantidades ridículas. Dentro, con una copa de vino, y suficientes tapas para irse contento llegaréis a los 15 euros.
Y por supuesto, simpática decoración a base de peinetas, que la zona es muy turística y tiene que parecer todo muy "typical spanish" :)
